“En cada título entregado se siembra confianza, se fortalece la comunidad y se reconoce la lucha de quienes han construido su vida en los barrios populares de Bogotá. Título en Mano no solo garantiza un techo seguro, también dignifica la historia de familias como la de Meleidy, que hoy pueden mirar al futuro con la certeza de que su esfuerzo tiene un respaldo y de que el Distrito está a su lado para seguir transformando realidades”.
Bogotá D. C., 22 de septiembre de 2025
Por: Adriana Arango - Oficina Asesora de Comunicaciones
En las montañas de Ciudad Bolívar, donde los barrios se levantaron con esfuerzo colectivo y sueños compartidos, vive Meleidy Torifio Valencia, una mujer cuidadora, madre y esposa, que hoy abraza la tranquilidad de tener lo que durante décadas parecía inalcanzable: el título de propiedad de su vivienda.
A sus 38 años, Meleidy camina con orgullo las calles del barrio Bella Flor en la localidad de Ciudad Bolívar, un lugar que ha sido testigo de la historia de su familia desde sus inicios. Sus padres fueron fundadores del sector cuando allí no había agua, ni luz, ni calles definidas, pero sí abundaban la esperanza y las ganas de construir futuro. “Aquí siempre hemos estado”, dice con emoción. Y no es una frase cualquiera: significa haber resistido, haber permanecido, haber apostado por su tierra a pesar de las adversidades.
Hoy, su núcleo familiar está compuesto por su esposo, sus hijos y su padrastro, con quienes comparte techo, trabajo y sueños. En su hogar no solo se tejen historias, también se confeccionan chaquetas de cuero y lona para motociclistas, fruto de un oficio que su esposo aprendió para poder trabajar desde casa y cuidar a los niños, y que luego él mismo le enseñó a ella. “Confeccionar me parece bonito porque me permite estar en la casa con mi familia”, afirma.
Durante años, la casa de Meleidy fue apenas una construcción en obra negra: paredes inconclusas, pisos sin terminar, techos que dejaban entrar el frío. Una vivienda que cobijaba, sí, pero que no garantizaba la seguridad ni la dignidad que toda familia merece. Todo cambió en 2022 cuando a través del programa Título en Mano de la Caja de la Vivienda Popular (CVP), Meleidy y su familia recibieron el título de propiedad de su predio. Ese documento fue la certeza de que el lugar que habían defendido y habitado por años ahora era suyo de manera legal y definitiva; fue la tranquilidad de tener un patrimonio para heredar a sus hijos y un respaldo para acceder a créditos. Fue, en palabras de ella, “un alivio que le da a uno calidad de vida, seguridad y confianza”.
El beneficio no solo transformó la vida de Meleidy y de su familia, también impactó a la comunidad: contar con títulos de propiedad la fortalece, aumenta su confianza en las instituciones y le abre oportunidades de desarrollo. Cuando un hogar accede a la titularidad, mejora su vivienda, dinamiza la economía local, atrae servicios y multiplica la esperanza en el barrio. En Bella Flor, la historia de los fundadores ahora se mezcla con la de nuevas generaciones que crecen sabiendo que su casa ya no está en riesgo, que nadie podrá arrebatársela y que podrán construir sobre bases firmes. “Antes no recibíamos visitas con tranquilidad porque la casa estaba incompleta. Ahora, con mejoras, podemos abrir la puerta con orgullo. Eso cambia hasta la manera en la que uno vive y se relaciona con los demás”, confiesa Meleidy.
El programa Título en Mano es liderado por la CVP, entidad de la Alcaldía Mayor de Bogotá que ha acompañado de cerca a familias como la de Meleidy en todo el proceso: desde la convocatoria, la revisión de documentos y las visitas técnicas, hasta la entrega final del título. “Durante todo el proceso siempre nos acompañaron, nunca nos dejaron solos”, recuerda. Esa cercanía institucional, esa mano que guía y no suelta, genera confianza y hace que las comunidades sientan que no están olvidadas, que el Distrito está presente y que su esfuerzo vale la pena.
Hoy, con su título en mano, Meleidy tiene un mensaje para la ciudad: “Que no desfallezcan. Hay muchas familias que no tenemos las mismas oportunidades y gracias a este apoyo hemos salido adelante. Aquí no había agua, no había luz, y quienes fundamos sabemos lo difícil que fue. Por eso, les pido que sigan acompañando a las familias, porque se lo merecen y porque con su ayuda podemos tener una vida mejor”.
La voz de Meleidy se convierte así en símbolo de miles. Su historia nos recuerda que detrás de cada título de propiedad hay un hogar que se fortalece, una comunidad que se dignifica y una ciudad que avanza. En Bella Flor, Título en Mano entregó futuro.